Perfiles

Princesa Masako, una historia de lucha y depresión

La princesa Masako, esposa del príncipe heredero de Japón, tiene una complicada historia

Dulce García

Amante del mundo digital, el rosa y los climas cálidos

Publicado el:

La princesa Masako es la esposa de Naruhito, el heredero al trono japonés, pero su historia en la realeza no ha sido un cuento de hadas.

La futura emperatriz consorte nació en 1963, es hija de uno de los diplomáticos japoneses más influyentes de su país. Vivió en Rusia y Boston estudiando en las escuelas más prestigiosas junto a sus dos hermanas, Reiko y Setsuko.

Estudió Economía en Harvard y una especialidad en la Universidad de Tokio, ahí fue donde conoció al príncipe Naruhito; sin embargo, Masako lo rechazó por años hasta que la presión familiar la llevó a aceptarlo.

Ella sabía lo que le esperaba, no quería casarse con un miembro de la Familia Imperial, pero la presionaron hasta que se comprometió en 1992.

Nunca pudo adaptarse al sistema de la realeza, lo consideraba temible y muy estricto, tanto que en 1993 perdió el habla por problemas psicológicos.

Ha tenido una vida llena de opresión, la obligaron a dejar su carrera diplomática, tenía a su cargo La Oficina de relaciones con Estados Unidos, no podía ocuparse de asuntos políticos y tenía prohibido hablar otro idioma en eventos oficiales.

En el 2004 se le diagnosticó depresión y desorden por estrés, luego de ser hospitalizada por herpes provocado por el mismo.

Desde el matrimonio ha vivido agotada y con trastorno de adaptación por tantas responsabilidades a su cargo; además sabía que el objetivo de casarla con Naruhito era procrear un hijo varón que se convirtiera en el heredero. 

Solo tuvo una hija, la princesa Aiko, que por ser mujer, no podrá llegar al trono. Fue tanta la decepción del pueblo que agravó la enfermedad de Masako.

Cuando su sobrino Hisahito nació, Masako descansó porque temía que la Ley permitiera reinar a su hija y sufriera tanto como ella lo estaba haciendo, así que en ese momento declaró que dejaría de buscar un segundo bebé.

Se esperaba que resuelta la presión del heredero Masako saldría de la depresión, pero no fue así. Ha dejado de asistir a los eventos más simbólicos para su familia como Año Nuevo y el cumpleaños de su esposo.

En abril del 2019 el emperador abdicará para que Naruhito llegue al trono, algunos medios aseguran que Masako no podrá tener el título de emperatriz consorte por su enfermedad, otros suponen que sí pero la mayoría de los japoneses no están de acuerdo.

¿Qué pasará con “La Princesa Triste”?

 

Fotos: Reuters.

También podría interesarte:

Naruhito y Masako de Japón, su vida en imágenes

La princesa que renunció a un sueño

La realeza en Japón podría desaparecer