Nueve datos que no sabías de la boda del príncipe Carlos y Lady Di
El 29 de julio de 1981, una joven Diana caminaba hacia el altar en donde contraería matrimonio con el príncipe Carlos, futuro rey de Inglaterra. La boda se convirtió inmediatamente en uno de los eventos de la realeza en todo un referente popular y alrededor de él hay varias anécdotas que quizá no sabías.
Para celebrar 39 años desde aquella fecha, te dejamos algunos datos que tal vez no sabías de la boda de Diana y Carlos, como detalles del enorme vestido de tafeta que usó Diana de Gales o el ya icónico beso de la pareja en el balcón del Palacio de Buckingham.
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1. El vestido de Diana tuvo que ser ajustado hasta el último día
Los diseñadores, David y Elizabeth Emmanuel tuvieron que ajustar el vestido de Diana hasta el último día pues la entonces futura princesa seguía bajando de peso.
Según varios reportes, debido a la bulimia que padecía, Diana pasó de medir 73 centímetros de cintura a 58 centímetros en cuestión de meses. “Cada que (Diana) venía a una prueba, había bajado más de peso […] Tuvimos que cambiar el prototipo varias veces para no tener que arreglar el vestido ya hecho en seda”, dijo Elizabeth Emmanuel al diario británico Express.
[Foto: Royal UK]
2. Los diseñadores no tomaron en cuenta el tamaño del vestido
Con una cauda de tafeta de más de siete metros y una amplia falda, Diana apenas y cabía junto a su padre en el carruaje en el que llegó a la Catedral de San Pablo. La cauda del vestido tuvo que doblarse y la falda comprimirse lo más que se pudiera para que cupieran en el carruaje. Esto hizo que se viera ligeramente arrugado.
[Foto: Reuters]
3. Diana rompió una tradición al decir sus votos
La princesa Diana fue la primera que omitió decir la palabra “obedecer” en sus votos. Esto también lo haría Kate cuando se casó con William y Meghan cuando lo hizo con Harry.
[Foto: Royal UK]
4. El beso en el Palacio de Buckingham fue un intento de arreglar un error
Es tradición que luego de decir sus votos y dar el “sí, acepto”, los novios sellen el pacto con un beso, pero al parecer el príncipe Carlos estaba tan nervioso o quería terminar todo pronto que se le olvidó hacerlo al final de la ceremonia. Por eso, y para enmendar su error, la pareja salió al balcón del Palacio de Buckingham y se dio uno de los besos más memorables de la historia.
[Foto: Reuters]
5. El anillo de Diana fue escogido de un catálogo
Al pensar en un anillo de compromiso de la realeza enseguida viene a tu mente aquel zafiro rodeado de diamantes que ahora tiene Kate Middleton. Pues resulta que Diana, a diferencia del resto de las novias de la realeza, escogió su anillo de un catálogo de la joyería Garrand y no fue diseñado especialmente para ella. Ahora, el anillo es propiedad de Kate Midlleton.
[Foto: The Royal Family]
6. El príncipe Carlos lloró una noche antes de su boda
Según la escritora Sally Bedell Smith, autora del libro Prince Charles: The Passions and Paradoxes of an Improbable Life, Carlos pasó la noche llorando por la presión que le llevó a apresurar su matrimonio con Diana y al tener que renunciar a Camilla Parker Bowles. En 2005, el futuro rey se casó con la duquesa de Cornwall.
[Foto: Royal UK]
7. Diana manchó su vestido antes de la ceremonia
Tal vez nadie lo notó, pero Diana derramó su perfume favorito sobre su vestido y durante la ceremonia trató de cubrir la mancha que quedó en la falda.
[Foto: AP]
8. Tuvieron 27 pasteles hechos por el repostero principal de la escuela de cocina de la Marina Real.
9. Diana tuvo unos zapatos hechos a la medida
Debido a su altura, Diana se aseguró de que sus zapatillas no le hicieran verse más alta que el príncipe Carlos, por lo que casi usó unas flats hechas a mano que tardaron un año en estar listas.
Los zapatos cubiertos en seda tenían más de 500 brillantes y 132 perlas. En la suela tenían una “C” y una “D” dentro de un corazón pintadas a mano.
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