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La primera maestra española

La primera maestra española
Servando Gómez
Publicado el:

Garbiñe Muguruza conquista el torneo Akron WTA Finals ante la estoniana Anett Kontaveit. La tenista ibérica es la vigesimocuarta campeona y la sexta distinta en las últimas seis ediciones.                            

GUADALAJARA.- A sus 28 años, Garbiñe Muguruza hace historia en la perla tapatía al convertirse en la primera española en coronarse como maestra del circuito femenino. La nueva reina del deporte blanco derrotó a la estoniana Anett Kontaveit por 6-3 y 7-5. Además, es la más longeva con el trofeo desde Serena Williams (2014).Con cuatro triunfos en cinco partidos, la caraqueña que juega para España ha demostrado ser la mejor de las ocho participantes durante los ocho días de competencia, tomando el relevo en el palmarés de Ashleigh Barty, campeona en 2019 en Shenzhen y número uno en el ranking ATP, quien decidió no acudir a esta cita a pesar de estar clasificada. Muguruza suma su décimo título como profesional en su decimoséptima final, sumando un récord de 42 partidos ganados y 17 perdidos. La campeona de dos grandes torneos, ya tiene la corona WTA Finals y puede relanzar su carrera.

IMPLACABLE                   

Desde el primer set, Kontaveit demostró que iba al todo o nada, evitando en lo posible los largos intercambios. La tenista de Estonia alcanzó la final de Guadalajara tras una secuencia de 29 victorias en los últimos 32 partidos.     

              

La grada estaba con la española, sin duda, pues ya ganó dos veces en Monterrey, la conocen. Un globo le sirvió a Muguruza para decantar a su favor la brecha inicial. La estoniana nerviosa fallaba bolas fáciles que condenaban su avance, tan solo en el primer set acumuló 22 errores no forzados por los 10 de la campeona.   

               

Garbiñe se cayó en el segundo punto del segundo juego de la continuación, pero siguió en la pelea como una guerrera que se niega a claudicar, sin sufrir mayores contratiempos. Un revés a la red acabó por decantar la final, donde la ibérica se tiró sobre la cancha, llorando de alegría, volviendo a la cima del deporte blanco.