Hay que ir: Meroma

El anhelo por ofrecer algo honesto, que conjuga sus conocimientos, técnicas, gustos y viajes, llevó a la pareja de chefs Mercedes Bernal y Rodney Cusic a desarrollar este espacio, pequeño en tamaño, pero grande en sabor

Han pasado más de ocho años desde que Mercedes Bernal y Rodney Cusic se conocieron durante sus años de escuela, cuando estudiaban en el French Culinary Institute de Nueva York.

Tiempo en el que trabajaron en distintas cocinas de famosos restaurantes de Italia, Londres y Estados Unidos, donde lograron perfeccionar su técnica, se casaron y, finalmente, decidieron venirse a nuestro país para radicar y abrir su primer proyecto en conjunto: Meroma.

“Llegamos a México en enero de 2016, Rodney no hablaba español, así que había que adaptarnos. Siempre supimos que queríamos un lugar pequeño, de hecho más de lo que es, y hacer un menú que cambiara constantemente, dependiendo de lo que pudiéramos encontrar en cuanto a producto”, recuerda Mercedes.

Fue así como, mientras buscaban el sitio ideal para su primer restaurante en conjunto, Rodney aprendió español y Mercedes se dedicó a trabajar con pequeños productores a través de iniciativas como el Mercado Alternativo Pequeño Productor. Una vez localizado el espacio comenzó el trabajo arduo de la pareja por darle el estilo y toque que deseaban.

Con la ayuda de Oficina de Práctica Arquitectónica, de Diego Mañon y Mariana Yuste, crearon el ambiente del restaurante, el cual mantiene esa atmósfera retro de la casa que lo alberga, y se enfatiza con el mobiliario que Comité de Proyectos diseñó especialmente.

La bienvenida al lugar la da una imponente barra, donde la mixóloga crea algunos cocteles para recibir a los comensales y ser una opción de espera, mientras se les asigna mesa o simplemente para disfrutar de un drink, alguna botana y una grata charla. Tras subir una escalera, se descubre un iluminado salón, en el que reina cierta intimidad, muy ad hoc a la filosofía de Mercedes y Rodney, quienes deseaban tener un lugar alejado de pretensiones.

Además, para quien gusta de disfrutar de la zona, cuentan con una pequeña terraza desde donde se aprecia el Museo del Objeto del Objeto. El momento más importante de la visita es al elegir qué comer. La carta no es muy grande y cada ocasión será distinta, ya que se van adaptando a lo que los productores les van llevando semana tras semana, “además somos muy exigentes con lo que servimos y nos gusta estar experimentando y modificando ciertas cosas en las recetas”, comparte Rodney.

Cuenta con platillos, que gracias a la gente que los visita, se han convertido en las estrellas de la carta como es el caso del crudo pesca del día con nuez pecana, chile serrano, perejil frito y vinagreta de limón amarillo, “lo que cambiamos diario es el tipo de pescado. Es como un tiradito, pero tiene nuez, lo que le da un sabor diferente”.

Otro de sus estelares son los agnolotti rellenos de 6 setas y queso fresco, mantequilla caramelziada, tomillo y hongos. “Viví en Italia mucho tiempo y me gusta mucho esa cocina porque está muy enfocada al producto, por eso hacemos mucha pasta. En un principio lo servimos con morilla, pero por la temporada lo tuvimos que sustituir”, resalta Bernal. También el cordero a la parrilla con salsa romesco de pepita y poblano, alcachofa Jerusalén y jocoque es de los más pedidos.

En cuanto a la repostería, Mercedes es la encargada, por lo que evita utilizar azúcar refinada, ya que le quita el sabor a los ingredientes, en su lugar emplea miel, agave y piloncillo que se han convertido en sus fieles aliados para crear la tarta de leche condensada de cabra, crema de canela y manzanilla o el buñuelo de pera en piloncillo y helado de yogurt y miel.

Es así como Meroma, que toma su nombre de la unión de las primeras sílabas de los nombres de los chefs, más el ma de “madre” (como Rodney le dice a la mamá de Mercedes, quien también es su socia), comienza a ganarse un espacio en la gastronomía de la Ciudad de México.

DIRECCIÓN: Colima 150, col. Roma

TELÉFONO: 5920 2654.

PÁGINA WEB: meroma.mx

HORARIO: martes a sábado de 13:30 a 23:00 horas y domingo de 13:30 a 18:00 horas

Fotos: Ana Lilia Rodríguez