Lujo

Moliere 222 se llena de deliciosos aromas

Montserrat Oliver, embajadora especial de J’adore,  uno de los perfumes más famosos de Christian Dior, presentó su última fragancia J’adore Othoniel en Moliere 222.


François Demachy y Jean-Michel Othoniel describen la fragancia como una historia que nos lleva hasta la legendaria isla de Murano, donde uno camina en busca de lo Maravilloso.

 

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Emanuel Rodríguez

Estudió Comunicación en la Ibero y tiene gustos culposos derivados de la moda.

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Montserrat Oliver, embajadora especial de J’adore,  uno de los perfumes más famosos de Christian Dior, presentó su última fragancia J’adore Othoniel en Moliere 222.

François Demachy y Jean-Michel Othoniel describen la fragancia como una historia que nos lleva hasta la legendaria isla de Murano, donde uno camina en busca de lo Maravilloso.

 

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Materia cuajada de flores, carne de cristal mezclada con oro, facetada por la mano y el fuego. Ya sea bajo la forma de una composición olfativa o de un frasco, cada creación inspirada por J’Adore es un acto intenso. Una voluntad común de comenzar por un tacto sensual y bruto, terciopelo de un pétalo o ligereza de un cristal en fusión, hasta la inmaterialidad de una huella mágica.

Regalar J’Adore, es ofrecer un bouquet, nos dice François Demachy, y componer J’Adore l’Absolu, es concebir el paroxismo de su sofisticación floral.