Síguele la pista: Jorge Plascencia García

Nacido en León, Guanajuato, toda su vida ha estado rodeado de piel y calzado, ya que es la especialidad de ese estado de la República Mexicana y su bisabuelo fundó la marca de calzado Flexi, la cual ha pasado de generación en generación.

“Estamos relacionados con la curtiduría y piel desde hace años, por lo que nos especializamos en esta materia prima”. Jorge se define a sí mismo como una persona creativa.

“Desde muy pequeño me ha movido la estética, como la arquitectura y la música, pero siempre tuve una inclinación por la moda”, por lo que tras estudiar administración de empresas en Los Ángeles, volvió a México a trabajar en servicio al cliente en una de las tenerías de la familia, “pero era algo temporal porque yo tenía muy claro que me dedicaría a la moda”.

Posteriormente, fue el director comercial de la empresa, “donde me empapé del tema del calzado y de la piel”. Al estar en ese proceso conoció a su actual socio, Diego Muñoz, quien también ha estado inmerso desde pequeño en este mundo, gracias a que su familia realiza zapatos.

“Un día en la feria Sapica en León vi unas botas pintadas a mano que llamaron mi atención en el stand de Diego, por lo que platicamos y planeamos explotar ese producto”, y de esa forma decidieron crear Bala Di Gala en 2016, una unión estratégica debido al conocimiento de Diego en el calzado y al de Jorge en la materia prima.

A lo largo de un año “desarrollamos la marca y la colección de ocho modelos detallados a mano, pintados por un grupo de artesanas de León, lo cual ha sido muy gratificante porque son mujeres que tenían trabajos inconstantes y actualmente tienen uno fijo en Bala Di Gala”.

Confeccionan el calzado en la fábrica de Diego en León, la bodega principal de la marca se encuentra en Los Ángeles, California, y venden en México y en Estados Unidos.

Su forma de negocio es a través de e-comerce, ya que “queremos evitar que el cliente pague el extra que piden las tiendas” y distribuyen también en ciertos bazares, en algunos eventos de nicho y en mercados itinerantes como La Lonja Mx.

El nombre de la marca deriba de Bahla, una palabra portuguesa que hace referencia al espíritu de una persona a la que le gusta probar nuevas experiencias y Gala era la Musa en la que Dalí se inspiraba para pintar sus cuadros, por lo que el nombre hace alusión a una mujer que siempre está en busca de nuevas cosas. Por el momento, la firma se dirige al mercado femenino, pero dentro de los planes de los socios a corto plazo está incursionar en el masculino.

Fotos: Fernando Canseco

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