Mujeres con arte: Abaseh Mirvali

Cuando Abaseh escapó con su familia de la revolución iraní con rumbo a España, nunca pensó que tres décadas más tarde estaría viviendo en México y preparando fideo seco en la Casa Estudio Luis Barragán para Simon Starling —uno de los artistas contemporáneos más importantes del mundo—durante las largas noches de trabajo in situ que el artista realizaba para en una exposición curada por ella. “Llegué a México en 2004, soy huérfana de patria y este es mi país”, dice la curadora de arte, quien fue directora de La Colecciçon Jumex de 2006 a 2009, y que a partir del 24 de enero hasta el 8 de marzo presenta su primera gran exposición independiente Bowles, Plates de Simon Starling, ganador del prestigiado premio Turner de diseño, que estará en la Casa Estudio Luis Barragán.

Abaseh Mirvali

Es su primer proyecto grande, luego de la salida de Jumex, “lo último que hice fue la exposición Invención de lo cotidiano en el MUNAL en 2008”, después presentó trabajos en Argentina, Brasil, Berlín, Vietnam, Estambul y Estados Unidos, “pero no en el D.F., y era una asignatura pendiente para mí”. Durante esos años, en su lista de deseos se encontraba montar muestras en México “y tenía una lista donde estaba Simon Starling”.

El sueño se hizo realidad, con una exposición pequeña en espacio y temporalidad, pero enorme en el significado y la importancia que tiene para el arte contemporáneo mexicano. “A Simon lo enganchas con historias donde hay personajes perdidos, donde las anécdotas dan vida, y con ella lo hice venir”. La anécdota era sobre un platón de plata diseñado por Luis Barragán que existió en la decoración de la casa Prieto López, del Pedregal; poco se sabía de él, la información existente era que toda la plata barraganista había sido fundida. Abaseh le prometió investigar y le dijo que si lo encontraban, “tendríamos que hacer un proyecto en México con la pieza. Quería comprometerlo con México”.

Abaseh llamó a su amigo Eduardo Prieto para hablarle de la pieza, él la buscó “y cuando la encontró nos la llevamos a Nueva York para hacer un escáner 3D y enviárselo a Simon a Copenhague”. Así comenzó la aventura.Starling proyectó reproducir en otros dos-platones que él había recogido por el mundo, para ello convocó al platero alemán Michael Steger y comenzron un proceso.

Pensó también en una instalación completa con las herramientas y fotografías de daguerrotipos con imágenes de las piezas de decoración que Barragán puso originalmente, además de las esculturas añadidas que Simon colocó.Estas son la pieza La Torre, de la platera mexicana Tane, y A bowl forged from a bar of fine silver, del joyero alemán Karl Fritsch, “que parecen reflejar a la perfección la transformación que experimentó la plata de la familia Prieto López, en exceso decorada, hacia una platería moderna minimalista”, como un ejemplo del paso del tiempo, según cuenta Abaseh.

FIDEOS PARA EL ALMA

Una de las cosas que más emocionó a la curadora, fue poderse poner en contacto con los herederos del mexicano Alfredo Ortega, “quien fue el platero de Barragán y uno de sus cercanos colaboradores, a los que la historia no le ha dado su lugar, y Simon quiso devolverle su sitio”.

 Claro que nada de esto hubiera sido posible sin la colaboración de Catalina Corcuera, directora de la Casa Estudio Luis Barragán, “que me dio las facilidades para todo, me dijo claramente los límites; yo confío en mi artista y sabía que respetaría el legado”. Así, Simon se internó día y noche para trabajar in situ, “le cociné un fideo seco la última noche porque no comió nada mexicano”.

Es preciso comentar que, a propósito de la exposición en la Casa Estudio Luis Barragán, Starling presentará en el museo experimental El Eco, una película conceptual con la actriz.