Hermandad en Acapulco

Marzo es un mes muy especial para dos puertos: Acapulco y Cannes; y es que a pesar de estar a miles de kilómetros entre sí, ambas ciudades tienen una relación entrañable desde hace 20 años, cuando fueron declaradas ciudades hermanas.

Del 26 al 30 de marzo y en el marco del 11er festival de cine francés en Acapulco, el puerto guerrerense se sació por completo de la escena cultural de Cannes:cine, gastronomía, danza, arquitectura, escultura música, moda y mucha fiesta.

Cada disciplina mostró una parte muy importante de sí.

El cine se hizo presente con tres días de proyecciones en el escenario Sinfonía del Mar, nombre que recibió por estar ubicado a la orilla del mar. La temática principal de los largometrajes y cortometrajes (estos últimos, seleccionados y proyectados a través del Quinto Tour Eurochannel de Cortometrajes), fue la mujer europea, como reflejo de la cotianeidad y estandarte de lucha.

La danza por su parte contó con la  presencia mixta de bailarines acapulqueños,  la compañía de danza contemporánea Hervé Koubi y bailarines del Centro Internacional de Danza de Cannes Rosella Hightower quienes presentaron la puesta en escena  Les Heures Florissantes en el Fuerte de San Diego. La obra se caracteriza por los contoneos poéticos de los bailarines cubiertos de barro y talco, mientras arrojan flores a los espectadores.

La gastronomía tuvo su participación a través de un concurso en el cual distintos chefs lugareños tenían que crear un platillo, basado en ingredientes típicos de la ciudad de Cannes.

La arquitectura contó con una exposición fotográfica llamada Architecture-durable, que retrata la importancia de la arquitectura orgánica, la cual busca aprovechar al máximo los espacios construidos.

La moda defendió su lugar con una pasarela de color-block, la cual a través de prendas coloridas y divertidas buscaba reflejar el lifestyle de Cannes. El evento tuvo lugar alrededor de la alberca del Hotel Boca Chica y fue amenizado por Djeko y K´you, (integrantes de Lemon Mint) y el DJ mexicano Fherdinand Strasse. 

La música permeó la costera a través de Les Plages Electroniques, festival de música electrónica de Cannes que puso a bailar con la diversidad de sus beats a todos los asistentes en el Beto´s Condesa, un lugar situado en la Av. Costera Miguel Alemán.

Por último, la escultura tuvo su bien merecido lugar gracias al concurso de esculturas en arena, en el cual la Alianza Francesa otorgó al ganador una beca de $25,000 pesos.

Fue así como Acapulco cerró una jornada de cinco días plagada de arte, cultura, risas, baile y fiesta, pero sobre todo de mucha unión y fraternidad.