Guadalupe Loaeza: atrevida escritora

Guadalupe Loaeza ha elegido a Elena Poniatowska como protagonista de su nuevo libro Atrevidas... en el que habla del poder del intelecto femenino.

Es una escritora multifacética: ha sido cronista de la vida social, novelista, periodista de tiempo completo y hasta conductora de televisión; una mujer incansable que siempre está lista para el siguiente proyecto. Así sucedió con su nuevo libro Atrevidas, mujeres que han osado, de Editorial Jus, en el que toma la figura de la también escritora Elena Poniatowska como punto de partida para hablar de las grandes intelectuales de nuestro país. La mitad del libro es sobre Elena; el resto, sobre talentos como la pintora Nahui Ollin y la escritora Rosario Castellanos, entre muchas otras. ¿Su objetivo? Celebrar a mujeres ejemplares de la cultura mexicana.

No terminas un libro cuando ya estás presentando otro...

Creo que la propia vida te va llevando, lo que me gusta hacer es contar historias, cada una exige su propia forma de contarlas. Fíjate qué curioso: cuando me han llamado de una editorial para proponerme un libro, la historia llega por sí misma, porque resulta que yo ya tenía una idea y textos que sólo necesitaban tomar forma. A veces, yo soy quien busca hacerlo.

¿Cuál es tu secreto para ser tan prolífica?

Ya ni me doy cuenta si  soy prolífica o no (ríe), creo que cuando me apasiono por un tema surge la necesidad de explorarlo, y eso fue lo que pasó con Atrevidas: soy una enamorada de la obra de Elena Poniatowska y una apasionada de su figura desde que tenía 36 años; primero porque la leía, y luego como alumna suya.

También hablas de otras mujeres, ¿por qué las incluiste y no escribiste sólo de Poniatowska?

El pretexto fue Elena, se nos ocurrió reunir estos textos porque prácticamente todas las mujeres del libro hablan de ella, como Ofelia Medina,Nancy Cárdenas, Jesusa Rodríguez e Ifigenia Martínez. O eran amigas suyas o las conoció o las entrevistó. Todo mundo tiene una anécdota con ella. De hecho, habrá una segunda edición.

¿Qué es lo que más has aprendido de Elena?

Que nunca ha hecho concesiones, es una mujer auténtica y congruente; es de una sola pieza, muy vertical y entregada, pero generosa. Nunca decepciona. Me encanta que no tiene secretaria; su muchacha, Martina, es eficientísima y es todo un personaje. Ella también se merece un libro.

¿Y en el terreno estrictamente personal?

Me encariñé enormemente con Elena porque tenemos muchas cosas semejantes y es como mi hermana mayor, no solamente en edad sino en trayectoria, talento y creatividad. Creo, además, que tiene una forma única de transmitir el amor por la literatura a quien la escucha.

Las dos son niñas bien...

¡Elena es la verdadera niña bien! Yo, a su lado, poco. Aparte es realeza polaca, como todos bien sabemos, es una princesa verdadera; pero ella, en su forma de ser, es una auténtica reina con todo esplendor. Una vez, varias amigas y yo la coronamos en la sala de mi casa y ella se dejó encantada, fue muy divertido... Es una mujer espléndida.

Fotos Ana Lilia Rodríguez

¿Y tú, cómo te sientes en este momento de tu vida y tu carrera?

Contentísima de seguir escribiendo, de tener a mis amigos cerca, de saber qué puedo hacer lo que más me apasiona. Soy una mujer muy, pero muy preocupada, pero eso es gran parte de lo que me hace seguir escribiendo.