Fin de un ciclo: Enrique Peña Nieto

En su último Informe de Gobierno, el presidente de México exalta las virtudes del país que dirigió durante seis años

Publicado el:10/09/2018 11:17:05 am

“Ha sido el más alto honor de mi vida servir a los mexicanos con pasión, entusiasmo, alegría, patriotismo y entrega. Ha sido el más alto honor de mi vida servir a México como Presidente de la República”, así resumió Enrique Peña Nieto la que fue su labor durante los últimos seis años. Así se expresó, luego de agradecer a sus colaboradores y a su familia, al terminar su mensaje a la nación con motivo del Sexto Informe de Gobierno en solemne ceremonia realizada en Palacio Nacional.

De frente a gobernadores, políticos, empresarios y en cadena nacional, el mandatario que dejará el cargo el 1 de diciembre próximo recordó que al iniciar su sexenio realizó un diagnóstico de la situación del país y se decidió que cinco temas serían primordiales: fortalecer las instituciones y combatir a las organizaciones criminales; reducir los niveles de pobreza; asegurar una educación de calidad para todos; eliminar las barreras que habían obstaculizado el crecimiento económico y actuar con responsabilidad y compromiso en el escenario internacional. Dicho esto, aseveró que entregará una nación con los menores porcentajes de pobreza y de carencias sociales desde que se tiene registro, en paz, más incluyente, con educación de calidad, próspero y con responsabilidad global.

“Este será el punto de partida de la próxima administración que el primero de diciembre habrá de asumir la alta responsabilidad de gobernar a México”, expresó. Aunque reconoció que su verdadero alcance será más evidente en los próximos años, se dijo orgulloso de las reformas estructurales que impulsó pues, aseguró, ya empiezan a producir resultados tangibles.

Destacó los cambios constitucionales en materia energética, educativa y de telecomunicaciones, entre otras, y afirmó: “las reformas estructurales son, sin duda, el logro más trascendental de esta administración y nuestra mayor aportación al futuro desarrollo del país”. En su despedida, estuvo acompañado por su familia, a quien también reconoció públicamente.

“Quiero dejar constancia de mi profunda gratitud. En primer lugar, a mi esposa Angélica por la compañía, la fortaleza y el apoyo permanente que incondicionalmente me ha dado. A nuestros hijos, Paulina, Sofía, Alejandro, Fernanda, Nicole y Regina, por su cariño, por su alegría que me contagian todos los días, por comprender el tiempo que les tocó vivir y por estar siempre a mi lado, muchas gracias queridos y amados hijos”.

A pesar de los retos que aún quedan, afirmó que sentaron las bases para que se superen en los próximos años. “Estoy consciente de que no alcanzamos el objetivo de recuperar la paz y la seguridad para los mexicanos en todos los rincones del país. Para hacer realidad este anhelo compartido por todos los mexicanos se requerirá de un esfuerzo sostenido por largo tiempo y firmemente apoyado con recursos públicos”.

Satisfecho con el cumplimiento de cinco metas nacionales planteadas al inicio de su gobierno y el 97 por ciento de los compromisos adquiridos con los ciudadanos, reiteró su invitación a analizar su trabajo con apego a los hechos y las cifras, más allá de las apreciaciones subjetivas, para dar cuenta de la transformación que ha vivido el país en múltiples ámbitos de la vida nacional, pero también para tener presente la persistencia de rezagos y desafíos que aún no han sido superados. “Hoy somos un país mejor del que éramos hace seis años, lograrlo ha sido desde el inicio de este mandato mi mayor compromiso”, declaró.