En corto: Rosa Puro

¿Cómo nació el proyecto?

SO: Somos de León y ahí está la primera sucursal, la cual abrimos junto con nuestra socia Andrea González, por la gran demanda que había por vestidos de noche, ya que para comparar uno tenías que venir a la Ciudad de México, ir a Guadalajara, Monterrey o a Estados Unidos. Era imposible, si tenías una boda o evento tenías que viajar para conseguirlo. Entonces decidimos traer los vestidos más padres de tiendas como Saks, Nordstrom y Neiman Marcus para venta y renta.

¿Por qué abrir una tienda en la Ciudad de México?

PY: Un día dijimos que era el paso que teníamos que dar para crecer y seguir evolucionando. Sabíamos que iba a haber mucha competencia y nos daba miedo, pero por lo mismo grandes oportunidades y nuevos retos. Ya que si en León había muchas clientas, aquí habría más. Entonces nos decidimos y hace poco más de un año y medio inauguramos la boutique en Plaza La Noria, ubicada en Bosques de las Lomas.

¿Cuál fue el principal reto de llegar a la capital?

SO: Tuvimos que tropicalizar el concepto, ya que el gusto de las mujeres de aquí es mucho más sencillo y minimalista. Por otro lado, en León no hay bodas de día y aquí la mayoría son en ese horario, entonces también tuvimos que incorporar vestidos cortos o más ligeros, faldas y jumpsuits. Mínimo una vez al año vamos a Nueva York a comprar nuevos modelos y nos inspiramos mucho en nuestras clientas.

PY: También el que no seamos de aquí implica un mayor reto, ya que en la tienda de León nos conocen y somos parte de la comunidad, en cambio aquí nos hemos tenido que dar a conocer mediante otros medios.

Fotos: Fernando Canseco

¿Por qué rentar un vestido?

SO: Es parte de la nueva cultura, los hombres llevan toda la vida rentando trajes y smokings y para nosotras no existía, y es una manera muy práctica de siempre verte bien sin gastar los millones. El cambio fue poco a poco, muchas todavía no se atreven, pero cada vez hay más mujeres que lo prueban.

¿Qué les deja su proyecto?

SO: Muchísima satisfacción el poder cumplir las expectativas del cliente, así como las tuyas es lo máximo. La verdad las ventas no son algo fácil y sí te tienes que preparar, pero cuando ves a alguien feliz y contenta consigo misma te da muchísima satisfacción.

PY: También cuando llegan y no saben qué quieren, o qué se les ve mejor y te piden tu consejo, el poder ayudarlas y darles los mejores tips es un sentimiento increíble.

¿Qué consejos le dan a alguien que quiere rentar un vestido?

PY: Qué venga con un poco de anticipación, ya que aquí les arreglamos la bastilla y se los dejamos listo. Nos ha pasado que vienen el mismo día de la boda porque se les rompió el vestido o algo, y aquí estamos como locas solucionando el problema; sí se puede, pero nada como hacerlo con tiempo.

SO: Por otro lado, que se metan a nuestras redes sociales para que se vayan dando una idea de lo que les gusta o les sirva de inspiración. Las rentas van desde 800 a 2,200 y los de venta están desde 6 mil a 20 mil pesos.