Perfiles

Dama del arte: Liliana Melo de Sada

Esposa, madre, abuela y Directora del Festival Internacional de Santa Lucía
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Originaria de Monterey, Nuevo León, Liliana Margarita Melo de Sada ha sabido, desde siempre, que su principal objetivo en esta vida es servir a la sociedad. Hija de comerciantes, hermana de seis, esposa de Federico Sada González y madre de Federico, Mauricio y Liliana, esta mujer se auto describe como inquieta, le gusta aprender algo nuevo todos los días, tiene mucha curiosidad por la vida y cree que esa curiosidad le abre las puertas para seguir activa.

Desde pequeña tuvo dos grandes ejemplos en casa, los cuales aprendió a seguir, “mi papá era un ser muy bueno, me conmovía su bondad”, comenta, y sobre su mamá asegura que era incansable, trabajadora, responsable y disciplinada.

 Todas estas virtudes las fue replicando durante su vida y cuando se convirtió en madre las supo transmitir a sus tres hijos. “Mi papá siempre me dijo: ‘Lucha por lo que piensas’, y eso es lo que he venido haciendo desde pequeña”, y esa constante motivación la ha involucrado con una gran cantidad de proyectos sin importar si son de ecología, desarrollo social o cultura, sin embargo, su gran amor por las artes la orilló a enfocarse casi en su totalidad al apoyo de nuevos talentos.

Su pasión fue la pintura, la cual desarrolló mientras estudiaba, ya que las escuelas le resultaban poco entretenidas y en sus cuadernos ella iba haciendo sus primeros dibujos. A los 11 años decidió tomar clases formales de dibujo y pintura, las cuales continuaron hasta los 35, cuando cambió de vocación y se alejó un poco del caballete para enfocar sus esfuerzos en apoyar  a otros artistas. Fue así que inició su apoyo en diferentes museos, patronatos y academias.

 FILANTROPÍA ARTÍSTICA

 Entre sus múltiples ocupaciones destaca la labor que inició en 2001, cuando comenzó su presidencia en la junta directiva que rige la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey, la cual dejó en febrero de este año en manos de Bárbara Herrera de Garza. Durante esos más de 15 años al frente de una de las instituciones académicas más respetadas de Nuevo León, Liliana se involucró de forma muy especial con todas las bellas artes, eso le fue abriendo nuevos horizontes y oportunidades.

En 2008 otro gran reto se presentó en la vida de la doña Liliana, al ser invitada para fundar el Patronato del Festival Internacional de Santa Lucía, el cual actualmente preside y cumplió 10 años en septiembre proponiendo un espectáculo de escala mundial en suelo regiomontano. El festival nació como un legado del Fórum Universal de las Culturas Monterrey 2007.

 “Fue el gobernador Natividad González Parás, quien me invitó a crear un patronato para desarrollar esta fiesta. Para lograr el cometido me di a la tarea de buscar el apoyo de instituciones culturales y académicas, también participan distintos personajes que han trabajado en proyectos de corte cultural y algunas instituciones del gobierno estatal. Aunado a eso, el año anterior también trabajamos con diversas alcaldías del estado para girar el festival a 19 municipios”, comparte Melo de Sada.

 El apoyo del gobierno federal también ha sido fundamental para impulsar este proyecto cultural, “a través de la Secretaría de Cultura y del Consejo de Promoción Turística de México es que se ha logrado consolidar como uno de los eventos más importantes del norte de México”, añade.

CONSTANTE INNOVACIÓN

Desde su inicio, “el proyecto ha cambiado de forma positiva, porque se ha ido formando un gran equipo con las universidades del Estado”, entre las que destaca: la Universidad Autónoma de Nuevo León, la Universidad de Monterrey, el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey y la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey.

“Ya somos más de 90 instituciones las que estamos unidas en este proyecto y cuando comenzamos éramos solo 20”. Entre sus otras actividades altruistas, Liliana busca conservar el planeta tierra de la mejor manera y por eso la ecología siempre ha sido un tema fundamental en su vida y en su trabajo. “Hemos seleccionado como tema permanente el cuidado de la Tierra, y bajo el eslogan: Una Ola de Amor por el Planeta, estamos a través de las bellas artes fomentando el cuidado de la Tierra y de todos los que la habitamos”, asegura. Uno de los principales retos desde hace diez ediciones era poder descentralizar los espectáculos y en 2016 se lograron alianzas con nuevos municipios. “Llegar a 19 sitios más ha representado un gran crecimiento, además este año se harán siete presentaciones en cárceles.

Asimismo, tendremos presentaciones directamente en colonias ubicadas en zonas marginadas”. Diálogos ha sido otro de los programas favoritos de la gente que se da cita en el festival y por tal motivo “en esta edición tendrán varias charlas tipo TED talks al aire libre, previas a los espectáculos, en las cuales se abordarán temas como emprendimiento, felicidad, arte y el cuidado del medio ambiente”, añade doña Liliana. Este proyecto se creó incluyente, es por eso que miles de familias completas del noreste de México y del sur de Texas, se reúnen durante los días de actividades. “Ésta es una excelente oportunidad para que vengan a conocer a nuestros grandes artistas locales, ya que 51 por ciento de la programación de este año estará a cargo de oriundos de Nuevo León”.

 ESPACIO PARA TODOS

La búsqueda de nuevos espectáculos es continua y también hay posibilidad de mandar propuestas para participar en el line up del festival, sin embargo, “es en febrero de cada año que ya se tiene la selección del contenido para la edición y por esto cuando estamos en la recta final de su realización es difícil integrar a más producciones, aunque en ocasiones hay que hacer ajustes de último momento”, confiesa. Siempre se ha querido tener un formato casual, al aire libre en las grandes plazas, “de ahí que una de nuestras cualidades es llevar ‘las artes a las calles’.

 Procuramos presentar producciones puristas, en el sentido de que realmente son propias de su país de procedencia, propuestas artísticas innovadoras, únicas, y todos los años traemos espectáculos que vienen por primera vez a México o a América Latina”. Este esfuerzo se ofrece de forma gratuita, son muy pocos los eventos que tienen un costo simbólico, pero 99 por ciento de las presentaciones son producciones que por su extraordinaria calidad, en otros países sería muy costoso poderlas ver y aquí tienen libre acceso. Liliana y su equipo siempre estarán buscando cómo incrementar el valor del festival y es por eso que “este año vamos a trabajar en conjunto con universidades reconocidas, una de estas es Tec milenio la que participa con su Foro Internacional de las Ciencias de la Felicidad los días 4 y 5 de octubre, esperemos que el próximo año podamos también tener un contacto más directo con los emprendedores de negocios y que se pueda lograr una sinergia con el arte y la cultura”. Por tal motivo, este festejo por los primeros diez años del Festival Internacional Santa Lucía están organizados para reunir a todos los interesados en el arte, quienes podrán conocer un sinfín de expresiones sin salir de Nuevo León.

UNA OLA DE AMOR

 El espectáculo debe de continuar y aunque la mesa directiva de este patronato decidió poner pausa en las actividades del Festival Internacional Santa Lucía por los sismos que se registraron en el 7 y 19 de septiembre, el pasado 28 se retomó el programa. “Era el deber ser, nuestros corazones no podían seguir adelante como si nada hubiese acontecido sabiendo que nuestros hermanos mexicanos, familiares y amigos estaban pasando por momentos tan difíciles, entendimos que iba a ser necesario hacer un cambio de planes”, comenta Liliana sobre este aplazamiento. Operativamente esta posposición significó cambiar vuelos, recintos, transportación, hospedaje, entre otros tantos detalles.

“Las compañías artísticas, los ponentes, las instituciones participantes, las sedes, los técnicos, productores, todos los involucrados en la organización, han sido sumamente empáticos y nos han facilitado los procesos para hacer las modificaciones necesarias, ya que fueron ocho días de actividades las que se cancelaron”, informa.

Sobre los invitados nacionales e internacionales, Liliana comenta que “las compañías de danza folclórica de Hungría y de Croacia, los miembros del Festival Vallenato de Colombia, los miembros de la Serenata Yucateca del Ayuntamiento de Mérida y otros tantos participantes ya estaban en Monterrey o en camino”, por tal motivo se tomó la decisión de sí llevar a cabo algunas presentaciones, “todas con un ánimo de muestras de cariño y solidaridad, pues nos decían: ‘No nos queremos regresar sin haberles entregado nuestra música, nuestros cantos y nuestra danza’. Estos eventos se realizaron en espacios cerrados y ya no al aire libre en las grandes plazas como normalmente se desarrolla el Festival”, añade.

Durante los shows que sí se realizaron se pidió un minuto de silencio por los mexicanos que desafortunadamentre perdieron la vida por este sismo, se dieron palabras de amor, cariño y fraternidad y se entonó en cada ocasión Cielito Lindo. Asimismo, “estamos invitando al público a ayudar, a solidarizarse y canalizar sus aportaciones a través del DIF Estatal, Cruz Roja, Cáritas, entre otras fundaciones.

En el caso particular del evento de la Serenata Yucateca, se hicieron dos funciones a beneficio los días 23 y 24 de septiembre, se entregaron los boletos con una aportación monetaria voluntaria y esos recursos se entregaron al DIF Nuevo León”, asegura Melo de Sada. La programación se volvió a acomodar y entre los cambios se anexó el evento especial, Una Ola de Amor por México, que se llevará a cabo la noche del 29 de septiembre, durante el cual se presentará el concierto El México Sinfónico con la Orquesta Sinfónica de la Universidad Autónoma de Nuevo León interpretando un repertorio de compositores mexicanos. Posteriormente, se presentará la Gala del Ballet Folklórico de Amalia Hernández”, finaliza doña Liliana.

Fotos: Memo Treviño 

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