Querido Diario…

Querido Diario. Una novia tiene que conocer lo que se llama PA-CI-EN-CI-CIA y CON-SI-DE-RA-CIÓN consigo misma y con los demás.

Debe tener paciencia y consideración porque es un cúmulo de emociones; en una sola decisión puede vivir todas las emociones posibles. A veces, todo toma dimensiones desproporcionadas porque quieres todo y nada al mismo tiempo. ¡Y por eso se complica!

Cuando eres la novia eres el centro de atención, y muchas de las personas que están a tu alrededor buscarán la manera de apoyarte y sobre todo darte oportunidad para que decidas todo. Y eso querido diario se siente lo máximo, pero sin duda también tiene un gran responsabilidad.

Por eso, hay que regresar a lo básico y considerar lo siguiente:

Uno no puede con todo – Conforme se acerca el gran día se tienen que tener listos todos los detalles, por lo que es una oportunidad para empezar a delegar y que te puedan apoyar en lo que tú necesitas.

Haz una carpeta con todo la información – Además de la carpeta de proveedores tienes que tener un apartado para que ahí puedas bajar todas las ideas.

Date la oportunidad – De llorar, reír, comer, dormir, sonreír, gastar en lo que más quieres, y sobre todo de no enojarte por nada con nadie. Esta es tu boda y es tu año, déjate fluir y aceptar las cosas tal cual son. Uno  no sabe cómo el universo conspira hasta que realmente empieza a hacer consciencia de su entorno.

Disfruta al máximo  – Esto es lo más difícil porque según tú estás disfrutando, pero siempre hay una posibilidad de que puedas dar más. Lo que yo he decidido es hacer una ceremonia de todo para que lo guarde en mi memoria como un gran momento y hacer sentir a los demás parte importante de este momento. ¡Espero estar lográndolo!

Y por supuesto lo más importante: soñar y hacerla a la medida para que cuando la novia cuente la historia de su boda siempre sonría y nunca diga a mi boda le faltó “inserte aquí lo que usted se pueda imaginar”.

Por: Diario de una novia