La Capilla Sixtina llega a México

En 1508, luego de aceptar la propuesta del papa Julio II,  Miguel Ángel decoró la bóveda de la Capilla Sixtina. No, no fue una tarea sencilla.

De hecho, por haber decorado la bóveda y la pared del fondo de este recinto, reafirmó su título como “uno de los grandes artistas de la historia”.

No exageran cuando lo llaman así.  Veamos: pintó sobre 500 m2 sin un solo ayudante. Fue un rebelde al plasmar ideas religiosas “políticamente incorrectas” en su último fresco. Y a sus 60 años (ya con mala visión y dolores de espalda) se “rifó el físico” para terminar El Juicio Final.

A propósito de la réplica de la Capilla Sixtina, que llegará el 7 de junio a la CDMX, nos pusimos a investigar sobre las obras de Miguel Ángel que adornan este espacio (y que pronto también podrás ver).

¿Sobre qué tratan?

En la bóveda, sobre los lunetos de las ventanas y las enjutas laterales, Miguel Ángel pintó a los antepasados de Cristo. En los triángulos, los tronos de los Profetas y las Sibilas. En las pechinas, las cuatro historias clave de la Salvación del pueblo de Dios.

Y en la parte central pintó nueve frescos que describen episodios del Génesis:

- Creación de la luz: Este fresco inaugura la primera serie de tres historias  que hablan de la Creación del Mundo.

- Creación de los astros y las plantas: Aquí , el pintor representó a Dios (de espaldas), quien al dirigir el brazo hacia un matorral,  alude al mundo vegetal. La misma figura, a la derecha, aparece y con un gesto enérgico de las manos indica y divide el cielo, el sol y la luna.

- Separación de la tierra de las aguas: En este otro se ve a Dios volando con los dos brazos extendidos. La energía en sus manos apunta al orden de la tierra y el agua.  

- Creación de Adán: Esta imagen es la más famosa. En ella se ve el episodio de la Creación del Hombre que tiene como punto central el contacto entre los dedos del Creador y los de Adán, a través del cual se transmite el “soplo de la vida”.

- Creación de Eva: Aquí Miguel Ángel representó el surgimiento de Eva del costado de Adán.

- Pecado original y Expulsión del Paraíso terrenal: Ambos episodios se hallan separados por el árbol del bien y del mal, en torno al que se enrolla la serpiente que tiende el fruto prohibido a Eva, quien lo agarra y se lo come, para luego ofrecerlo también a Adán.

En otro lado del recuadro, expulsados por un ángel con la espada desenvainada, Adán y Eva se alejan del Paraíso terrenal.

- Sacrificio de Noé: Esta pintura es parte de tres frescos que hablan sobre Noé y su elección para ser el único hombre en repoblar la tierra, tras la decisión del Creador de destruir a todos los seres debido a la maldad humana.

- Diluvio universal: En el fresco se ve a una multitud agobiada tratando de salvarse frente al castigo de Dios, a otros amontonados en un islote alargando las manos para dar socorro a los que aún se hallan en peligro.

Y en el centro se ve una barca a punto de hundirse, mientras que en el fondo, se halla el arca en la que, según los deseos de Dios, hallarán la salvación Noé, sus familiares y parejas de animales.

- Embriaguez de Noé: La escena representa el episodio en el que Cam, Sem y Jafet encuentran a su padre Noé desnudo y ebrio.

Las pinturas las terminó en 1512. Pero regresó de nuevo a la Capilla en 1536 por solicitud del papa Clemente VII, quien le pidió una obra monumental para la pared del fondo del recinto.

Primero se le había encargado la escena de  La caída de los ángeles rebeldes, pero el resultado final  (bajo la influencia de algunos reformistas religiosos que unían el pensamiento luterano y católico) fue: El Juicio Final.  

- Aquí aparece La Virgen a un lado de Cristo, quien enjuicia a 400 figuras desnudas que están a su alrededor. En la pintura también se ve a los Santos y Elegidos esperando con ansiedad el veredicto.

Cuando fue inaugurado, los enemigos de Miguel Ángel lo acusaron de hereje y pidieron la destrucción del fresco. Por suerte nadie lo echó abajo.

Si quieres saber más, checa este video sobre la Capilla Sixtina.