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Aperitivos y postres que se llevan bien con el vino

Sorprende a tus invitados con estas deliciosas combinaciones

Vinos adecuados para aperitivos y postres
Vinos adecuados para aperitivos y postres

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¿Vas a invitar a tus amigas a una cena en tu casa y no sabes qué vino servir? Si quieres dejar a más de uno con la boca abierta, aquí te recomendamos algunas de las mejores combinaciones de vinos para tus aperitivos y postres.

 

Son una sugerencia de los expertos de ConsumoClaro del portal español eldiario.es. ¡No tienen pierde!

 

Aperitivos

 

Si deseas un vino para encurtidos (pepinillos, aceitunas) y frutos secos, lo mejor son los vinos generosos, como el Jerez en sus variantes, el Oporto y el Madeira, pasados por barrica, así como el Marsala italiano.

 

Foie gras

 

Servir este delicioso manjar, equivale a servirlo siempre con vino de Sauternes, o cualquier otro vino dulce francés. Si no lo encuentras (es caro y difícil de hallar), también puede casar con un  Riesling alemán.

 

Quesos

 

Dicen los expertos que, tanto en el mundo de los quesos como de los vinos, hay una variedad de uva para cada queso. Tengo un amigo que en este maridaje es un experto. Así que, siguiendo sus sabias  recomendaciones, podemos decir que los quesos tiernos y grasos casan muy bien con los vinos blancos con cuerpo o bien secos ligeros, e incluso algo dulzón que sea suave, para dar contraste.

 

Para los quesos azules, potentes de aroma y sabor, es mejor servirlos con vinos tintos de tono ligero pero afrutado, o bien tintos medios, es decir variedades potentes pero sin barrica. En cambio, los  quesos curados y muy curados aceptan muy bien los tintos potentes y maduros,  pasados por barrica.

 

Postres dulces

 

Casan con vinos dulces, desde el  Moscatell a la Mistela o la Malvasía, pasando por un Riesling alemán de grado, o un Sauternes francés. Un Oporto joven o un Madeira también joven resultan también muy recomendables. En el caso de los bombones o postres que tengan chocolate, es bueno degustarlos con un buen tinto potente y con cuerpo, que no sea excesivamente afrutado.

 

El champagne o el cava

 

Ambas bebidas, siempre que sean Brut, son el gran comodín del maridaje. No solo sirven para brindar al final de una celebración.

 

Por el contrario, estos vinos tienen una gran variedad de matices, sabores y aromas, y funcionan con casi todos los platillos, exceptuando las carnes rojas, dado que se trata de bebidas de alta acidez.

 

Ahora sí conviértete en la reina del maridaje. ¡Salud!